El conjunto de textos conocidos como los Sefirot es el segundo tipo de conocimiento que concurre en el Tarot y que, de manera sucinta, vamos a ver en este artículo.
Según Alphonse Louis Constant, reputado estudioso y ocultista francés que vivió en la primera mitad del Siglo XIX, los Sefirot son un conjunto de símbolos profundos que han pasado de generación en generación desde siempre. Estos Sefirot son comunes a toda la raza humana y vienen a estar próximos en su significado y su formulación a los arquetipos.
Sefirot: Dogma de Alta Magia
En su obra “Dogma de la Alta Magia”, Constant viene a decir que todas las religiones han conservado en su recuerdo un “primitivo libro” escrito por los primeros sabios de este mundo. Este conjunto de símbolos, trascendentes e inherentes a la propia condición humana, han provisto a las distintas Escrituras Sagradas de sus letras, su significado y su valor trascendental, al Verbo su carácter y a la filosofía sus signos misteriosos y su búsqueda constante de nuevas respuestas para viejas preguntas.
Este libro, verdadero compendio de antiguos saberes y conocimientos, permanece rodeado en una especie de misteriosa neblina: para los judíos fue obra de Henoch, para los egipcios de Hermes de Trimegisto y para los griegos su autor fue Cadmo; sea como fuere lo llamativo es el conocimiento de este texto y estos antiquísimos saberes para tres culturas y formas de entender el mundo como las que hemos citado. Las tres culturas asumen y asimilan dichos conocimientos, como algo sagrado y profundamente trascendental.
Se podría decir que estos conocimientos, compilados en este libro, era el resumen simbólico de una antigua tradición que más tarde derivaría en lo que conocemos como Cábala. De esta manera, esta tradición se funda en el dogma de que “lo visible es la medida proporcional de lo invisible”; de tal manera que vemos en esta aseveración una reseña a un plano superior a lo material, a la existencia de otro mundo u otras realidades que el hombre no controla. Sobre esta base, los antiguos conocimientos, a través de los Sefirot, asignó ciertas connotaciones de una simbología profunda y universal al concepto de número, siendo cada zefira, un elemento que invocaba determinados valores y significados.
La zefira es un concepto esencial en este punto. De tal modo que el concepto zefira define una “emanación numérica” y sugiere la idea de que una cosa es engendrada por otra cosa, respetando un cierto orden a partir del sefira Kether, el impulso divino de la vida, hasta llegar al sefira Malkut, el mundo material.
En el sentido de la manifestación desde lo divino hasta lo material, los sefirotson: Kether, Hokmah, Binah, Chesed, Geburah, Tipheret, Netzah, HodYesod etMalkut.
Órden involutivo, evolutivo, árbol de la vida
Este orden es llamado “involutivo” puesto es el sentido en el cual el universo ha sido creado.
El orden inverso, llamado “evolutivo”, es aquél que se tendrá que tomar para reanudar con el origen, la chispa de la vida divina que se esconde en nuestro interior. Es importante señalar que cada uno de los sefirot contiene una parte de todos los otros que están hacia “arriba” y también contiene la energía necesaria para engendra los zefirot que están hacia “abajo”.
En el orden inverso, los 10 sefirot del “árbol de la vida” corresponden a las diez etapas de la purificación espiritual que el iniciado debe recorrer para pasar del mundo material al divino, es decir, a la unión con Dios. Según la Cábala, cada uno de nosotros tenemos una parte de cada sefira. Por otra parte, hay sefirot que se anulan entre sí, como Hokmah y Binah y otros que concuerdan entre sí y que se llenan de energía, como Geburah y Kether. Estos principios son el fundamento mismo de la psicología y de la condición humana.
El enlace entre el espíritu y la materia se sitúa, en primer lugar en el sistema endocrino (el sistema de glándulas de secreción interna) y en segundo lugar en el cerebro y en el sistema nervioso. Estas son las zefiras con su significado a modo de sucinta reseña:
- Malkut (Reino) : representa el mundo material
- Yesod (Fundamento) : representa el éter, las ilusiones y las causas ocultas
- Hod (Gloire) : representa la razon
- Netzach (Victoria) : representa las emociones
- Tipheret (Equilibrio, Belleza) : representa el equilibrio y la armonia
- Geburah (Rigor, Temor, Destruccion) : representa la destruccion y la justicia
- Chesed (Gracia) : representa la inspiración y la bondad
- Binah (Comprension, Inteligencia) : representa la forma y la inteligencia
- Hocmah (Sabiduria) : representa el impulso creador divino
- Kether (Corona): representa la iluminación y la fusion con lo divino
Diremos para concluir y vinculando todo lo señalado con el Tarot, que Alphonse Louis Constant, afirma que la organización de las cartas del Tarot, de acuerdo con un orden definido, descubre todo lo que el hombre puede conocer acerca de su Dios, su universo, y él mismo. Cuando los diez números correspondientes a las energías creadoras (sefirot) se combinan con las 22 cartas relativas a los canales, la suma resultante es de 32 – el número propio de las vías cabalísticas de acceso a la Sabiduría. Según los cabalistas, por la misma razón que relaciona los 10 sefirot a las 22 letras del alfabeto de los judíos es la que dichos sefirot se relacionan con los 22 arcanos mayores.
La simbología y los significados de cada letra deben corresponder a la simbología y el significado de cada arcano. Este número también seria la razón de los 32 grados de la Franc-masonería, que elevan al candidato a la dignidad de un príncipe del Real Secreto, antes de alcanzar la fusión con el absoluto que representa el grado 33.
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